domingo, 20 de junio de 2010

¡Ningún estudiante preso por luchar! ¡viva la unidad obrero estudiantil!



Reproducimos el comunicado de nuestros compañeros de la agrupación universitaria En Clave Roja - PTS, ante el pedido de arresto para 3 de sus dirigentes.


¡ESCANDALO! Piden 50 dias de arresto para los estudiantes que se solidarizaron con los 160 despedidos de Kraft-Terrabusi
Hagamos una gran campaña activa desde los centros para derrotarlos

En un nuevo ataque al movimiento estudiantil, los fiscales del Gobierno de la Ciudad Aníbal Brunet y Martín Lapadú pidieron 50 días de arresto para los dirigentes estudiantiles de la UBA Juan Oribe, Vicepresidente del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras, Jesica Calcagno, ex Presidenta del Centro de Estudiantes de Ciencias Sociales, y Patricio del Corro, Secretario General de este último centro de estudiantes. Los tres son también dirigentes de En Clave ROJA-PTS y referentes de la unidad obrero-estudiantil a partir de su rol en la lucha de Kraft-Terrabusi. Este ataque se da en un contexto en el cual Cristina Fernández de Kirchner le solicitó al poder judicial que impidan los piquetes en Gualeguaychú, y el juez decidió pedir el cese del corte. Independientemente de cómo se desarrollen los acontecimientos, hay un evidente avance en la criminalización de la protesta social cuando también desde altas esferas gubernamentales se empieza a pedir una “reconciliación” con las FF.AA. genocidas. Tenemos que impedirlo.

Los estudiantes tienen causas abiertas por haber protagonizado los cortes de Callao y Corrientes del año pasado en solidaridad con los trabajadores de Kraft Terrabusi que sufrían más de 160 despidos por parte de la multinacional norteamericana que tiene ganancias multimillonarias y es propiedad de Warren Buffet, el segundo hombre más rico del mundo. Los fiscales montaron en ese entonces un fabuloso operativo de espionaje ilegal sobre los estudiantes y armaron una causa de más de 600 fojas con fotos en primer plano de todos los participantes de los cortes y averiguaciones sobre la filiación política de los mismos, lo cual demuestra que no se trataba de una simple contravención de tránsito sino de una persecución política contra los estudiantes que nos solidarizábamos con los obreros. Hoy usan esta causa armada con espionaje ilegal para pedir 50 días de arresto.

Los fiscales quieren judicializar la protesta social e imponer que los problemas de tránsito valgan más que el derecho a trabajar; que los estudiantes dejemos de solidarizarnos con los trabajadores cuando enfrentan despidos, bajos salarios o condiciones de vida miserables. Porque temen que el ejemplo de Kraft, cuando obreros y estudiantes luchamos juntos, se generalice a todo el país. A los capitalistas les aterroriza la unidad entre obreros y estudiantes que hace 41 años hizo el Cordobazo y hoy empieza a mostrar cómo enfrentar los planes de los capitalistas, cuando un nuevo movimiento obrero empieza a nacer y recientemente, en las paritarias, una vez más desde la alimentación, pateó el techo laboral que querían imponer el gobierno, las patronales y la burocracia sindical, imponiendo el 35% de aumento. Por eso nos atacan, y nosotros les decimos que no nos amedrentarán, que enfrentaremos sus ataques y seguiremos profundizando el camino de la unidad obrero-estudiantil, apoyando hoy a las obreras y obreros de Fel-Fort que enfrentan despidos, a los trabajadores del subte que luchan por el reconocimiento de su sindicato que el gobierno K les niega y junto a los obreros de Stefani en Neuquén que defienden sus puestos de trabajo, entre otros ejemplos.

Mientras ellos pretenden regimentar la protesta (como hicieron los K el año pasado usando a la Bonaerense para reprimir en Kraft-Terrabusi y ahora hace el macrismo con estas causas), nosotros salimos a las calles porque no queremos ningún despido ni precarización laboral, porque defendemos como nuestra la lucha de los trabajadores por organizarse en sus lugares de trabajo frente a la dictadura patronal que persigue y despide a los delegados antiburocráticos. Porque queremos presupuesto para educación y para salud, y no para pagar la deuda externa o subsidiar a las empresas. Llamamos a todos los centros de estudiantes del país a tomar en sus manos esta campaña contra el ataque macrista a los dirigentes estudiantiles.

¿Quiénes son los que persiguen al movimiento estudiantil?

El fiscal Aníbal Brunet es el que viene llevando desde un principio la causa contra los estudiantes, es el que le ordenó a la Policía Federal realizar tareas de inteligencia en los cortes de calle, que incluyen fotos y videos de cada uno de los estudiantes.

Martín Lapadú es un fiscal “estrella” del PRO. Según algunos medios de comunicación, el joven fiscal disputa el puesto dentro de la justicia porteña como Fiscal de Cámara, por su buena “predisposición” y “eficiencia” en tener mano dura con los cortes de calle. Con este ascenso el salario de Lapadú, pasaría de $21.467,58 a $35.816,73. Es el mismo que mandó, mientras los trabajadores del subte liberaban los molinetes como parte de un plan de lucha, más efectivos de la Policía Federal a la estación Retiro para "garantizar el normal funcionamiento del servicio público".

Si tocan a uno tocan a todos!

Si no podemos permitir que se siente como precedente que cada vez que un estudiante sale a luchar le abren causas, menos podemos aceptar que pidan ¡50 días de arresto! Estas causas son un ataque al conjunto del movimiento estudiantil y sientan como precedente un avance en la criminalización de la protesta social. Del movimiento estudiantil no sólo están procesados Jesica, Juan y Patricio, sino también Germán Feldman, ex presidente del CECSO imputado por el estacionamiento de Sociales, Octavio Crivaro, también ex presidente del CECSO y dirigente nacional del PTS, procesado por haber apoyado la lucha de los trabajadores del Casino y estudiantes de FADU, entre otros. Como si esto fuera poco, el dirigente del MTR y referente del movimiento de desocupados, Roberto Martino, se encuentra preso por luchar contra el estado terrorista de Israel que recientemente perpetró un nuevo ataque contra el pueblo palestino que provocó un escándalo internacional. ¡Tenemos que pararles la mano! Redoblemos la campaña por el desprocesamiento a todos los estudiantes y trabajadores procesados y presos por luchar.

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