Pasaron siete años de aquellas jornadas del 19 y 20 de diciembre, en las que el pueblo se levantó y derrotó al gobierno de De la Rúa y Cavallo. Fue cuando en la Argentina vimos en carne propia cómo los capitalistas le hicieron pagar a todos los trabajadores y el pueblo pobre su crisis. Cientos de empresas cerraban y los patrones se llevaban el dinero al exterior, mientras que millones de trabajadores pasaron a estar desocupados.
Hoy, volvemos a ver cómo los capitalistas, en el mundo entero, intentan descargar SU crisis sobre los trabajadores y el pueblo. Millones de puestos de trabajo se destruyen en Europa, Asia y América; en Europa avanzan con los recortes a la salud y la educación; en Estados Unidos, en lo que va del año hubo 2 millones de despidos y rebajas de salarios, mientras destinan sumas multimillonarias para salvar a los banqueros.
Pero ante estos planes capitalistas los trabajadores del mundo no ofrecieron servilmente la otra mejilla, sino que alzaron su voz y dijeron basta. En Grecia vemos como la fuerza de la juventud obrera y estudiantil se hace sentir en las calles, enfrentando a las fuerzas represivas y el ajuste. La huelga general, que paralizó al país, dejó en claro quienes tienen el poder, al mismo tiempo que los estudiantes quemaban comisarías y asaltaban armerías. En Italia también se sintió la fuerza de la huelga general. En el Estado Español miles de estudiantes toman las universidades contra los recortes, al igual que en Alemania e Irlanda. En Chicago, EEUU, los trabajadores de la fábrica Republic Windows and Doors, se resisieron a abandonar pacíficamente sus puestos de laburo, impidiendo que la patronal intente cerrarla.
En nuestro país, Cristina anuncia con bombos y platillos su "plan anticrisis", facilitando el "blanqueo de capitales" a los grandes evasores, mientras ya comenzaron a despedir y suspender a miles de compañeros en todo el país, principalmente al sector más precarizado de la clase: los contratados. A su vez, empiezan los recortes para salud y educación...
Los burócratas de la CGT y la CTA salieron a apoyar los planes K dejando correr los primeros ataques patronales. La lucha de los jóvenes contratados de Iveco y Gestamp de Córdoba, que, valientemente, y en unidad entre contratados y efectivos, enfrentaron los despidos con cortes de ruta y movilizaciones, demuestra que ningún trabajador se calla la boca y acepta complaciente una crisis que no provocó.
Recordando los tiempos de aquellas jornadas del 2001, podemos ver a la ceramista neuquina Zanón, un ejemplo vivo de cómo la clase trabajadora puede diseñar un verdadero plan 'anticrisis' a favor de sus propios intereses. Ante el vaciamiento la tomaron y la pusieron a producir, creando con el tiempo cientos de puestos de trabajo.
Pero los capitalistas no quieren permitir que ante sus planes de despidos y recortes digamos basta, tomemos las calles, las fábricas, los colegios. Por eso empiezan a prepararse... Ya podemos a ver cómo con la campaña por más "seguridad" y policía, engrasan su aparato represivo para descargar la crisis sobre la juventud trabajadora y los sectores más precarizados, e impedir que levantemos cabeza. Es así, que los capitalistas de conjunto reclaman la baja de la edad de imputabilidad y el "gobierno de los derechos humanos" plantea abiertamente la necesidad de mayor presencia policial.
Ellos se preparan, eso lo sabemos... Es hora de que nosotros, los trabajadores y estudiantes, nos preparemos para que la crisis la paguen los capitalistas, poniendo en pie un gran movimiento juvenil revolucionario. Este 20 de diciembre seamos miles en las calles para decirles que los despidos, recortes y suspensiones, NO PASARÁN!
Concentración: Sábado 20, 16:30 hs,
en la Municipalidad
Los despidos, suspensiones y recortes...
NO PASARAN
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