domingo, 12 de octubre de 2008

El capitalismo en terapia intensiva

LA CRISIS SE POLITIZA Y GLOBALIZA VELOZMENTE
La división europea frente a la crisis financiera internacional, y la semana anterior la fractura en los partidos republicano y demócrata en Estados Unidos, muestran que la crisis capitalista mundial –la más importante desde la década de 1930- se politiza en forma acelerada. El salto en la crisis europea y la repercusión en los países semicoloniales y dependientes, son indicadores de la globalización de este desastre financiero. Como venimos explicando, la mayor internacionalización de la economía y de las finanzas ocurrida en las últimas décadas, permitió una recuperación de la tasa de ganancia, pero también ha aceitado los mecanismos de contagio de las crisis.

EE.UU.: ¿Se evitará una gran depresión?
La aprobación del Plan Paulson en la Cámara de Representantes el pasado 3 de octubre no fue suficiente para frenar la caída de los mercados en todo el mundo. Ante esta situación, la Reserva Federal (FED) tuvo que tomar medidas extremas para evitar el colapso financiero y, sobre todo, remediar la falta de financiamiento de las empresas, lo que podría precipitar la entrada en una Gran Depresión.
Así, la autoridad monetaria pagará intereses a los bancos por las reservas que tengan en la FED con el objetivo de mejorar las condiciones de liquidez de las entidades financieras. Pero, más importante aún, anunció la constitución de un fondo para comprar pagarés de las empresas que se han quedado sin financiamiento en los mercados de crédito. La creación de un Fondo de Financiación de Títulos Comerciales (CPFF, “Commercial Paper Funding Facility”), anunciado por la FED tiene como objetivo proveer liquidez a las empresas que emiten deuda privada, y que cada vez encuentran menos compradores en los mercados.
Pero esto tampoco fue suficiente y las bolsas siguieron en baja. El detonante esta vez fue el discurso del presidente de la FED, Ben Bernanke, quien aseguro que estaría “reconsiderando si su actual postura -mantener los tipos de interés en el 2%- sigue siendo la adecuada a la luz de los acontecimientos” y ha dejado las puertas abiertas a una baja de tipos de interés a corto plazo ante “el empeoramiento de las perspectivas de crecimiento económico”. Estas declaraciones, que muestran que la crisis va a seguir empeorando, desataron el pánico. Los números rojos se apoderaron del sector bancario. Sovereign, Wachovia y National City, que eran los únicos que habían registrado subas al comienzo de la jornada del 6 de octubre, se desplomaron un 15%, un 11% y un 9%, respectivamente. Mientras, entidades como Citigroup, Goldman Sachs o JP Morgan cayeron entre un 8% y un 13% al cierre. Uno de los bancos más castigado fue el Bank of America, con un derrumbe de más del 26%.
La gravedad de la crisis se demuestra en la impotencia de las autoridades monetarias y políticas. Valga como ejemplo el efecto inverso al esperado de la aprobación del plan de salvataje de 700.000 millones de dólares, o la reacción negativa ante la medida de la FED de comprar deuda de las empresas.
El intento concertado de los principales bancos centrales del mundo de bajar medio punto las tasas de interés tuvo apenas un impacto limitado.
Todo parece indicar que, cada vez más, empieza a instalarse una lógica perversa basada en la certeza de que ante la magnitud de la crisis, cualquier intervención es una gota en el océano.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es preciso que en esta crisis capitalista que intenta descargarse sobre nosotros con numerosos despidos en fábricas de todo el mundo -General Motors anunció una ronda de despidos que afectará a 1.600 trabajadores, Cemex anunció que despedirá a 6.000trabajadores en todo el mundo este año, algunos de los múltiples ejemplos- los obreros, estudiantes y el pueblo nos organicemos, planteemos métodos de lucha contra esto y siguiendo el ejemplo de faSinPat (ex Zanon) pongamos a funcionar las fábricas, los servicios, la salud y la educación bajo el control del pueblo, los trabajadores.